El fotográfo panameño Tito Herrera y el cartagenero Tico Anfulo visitaron en el marco del programa PhotoBarrio el Centro cultural Las Pilanderas del barrio el Pozón para compartir su experiencia y trayectoria en el oficio.
Por Sebastián Gómez Ospino / Edición Jennifer Ballestas
Fueron cerca de 30 niños y niñas del barrio El Pozón que compartieron la experiencia de contar historias del otro lado de la ciudad guiados de Tito Herrera, reconocido por trabajar en National Geographic y Tico Ángulo, fotografo cartagenero nombrado embajador de la paz de la ONU en un evento organizado por el Primer Simposio Internacional de Fotografía y el Instituto de Patrimonio y Cultura IPCC.
La jornada se dividió en dos partes. La primera fue una parte teórica sobre los conceptos de la fotografía, el uso de la cámara y los diferentes aprendizajes que ambos fotógrafos han tenido a lo largo de su experiencia. «Reconocer la belleza de los espacios que habitamos nos da la oportunidad de fotografiar mejor la realidad» comentó Tito a los asistentes.
El cartagenero Tico también aprovechó para recordarles a los participantes que »La fotografía es constante formación, esto es cuestión de disciplina y práctica, es mucho más que solo el talento»como en su experiencia, en el que manifestó todos los obstáculos que ha tenido que pasar para llegar a consolidarse como uno de los mejores fotógrafos de la ciudad.
Luego llegó el momento más divertido, el de la práctica. Los participantes salieron a capturar imágenes en el barrio en donde propusieron composiciones visuales a partir de lo aprendido en donde explicaron que reflejaba cada fotografía y la emoción por tomar por primera vez una cámara. «Saber no rendirse por encontrar sus sueños así sea con una cámara, es lo que aprendí el día de hoy, además de hacer fotos con amor, algún día seremos como ellos», aseguró Andrea, una de las participantes.
Al finalizar, Karen Romero, una de las profesoras asistentes manifestó «Estos eventos son de mucho provecho para ellos, hay mucho aprendizaje y eso nos ayuda a formarlos mejor, ojalá y se repitan un millón de veces estos eventos porque les dan herramientas para su futuro».